NOTA CONJUNTA DE LAS ASOCIACIONES CONSERVACIONISTAS

Comunicado
Los grupos abajo firmantes remitimos estas palabras para ofrecer una explicación al porqué los buitres son protagonistas de noticias ajenas a su naturaleza y para preguntarnos el porqué la administración opta por aumentar el gasto público para resolver una situación que se solucionaría aplicando todas las medidas legales que amparan el bienestar de aves y ganaderos.
Los Buitres tienen hambre
Hace tres años que se consiente esta situación. Tres años en los que el buitre protagoniza noticias que contradicen su esencia. El buitre se defiende del hambre. Acosar a animales agonizantes, o a reses parturientas muy debilitadas e incapaces de defenderse, es un comportamiento antaño muy excepcional. Hoy es un recurso como lo es comer basura. Recursos para no morirse de hambre. ¿Por qué tienen hambre? Tres razones: Negocios-servicios de recogida de reses muertas. No aplicar la normativa comunitaria y nacional favorable a la conservación de estas aves y aniquilar su vínculo con la ganadería tradicional.
La actitud del buitre, símbolo del equilibrio natural, es una llamada a nuestra responsabilidad. El buitre, emblema de conservación y reclamo turístico, ve declinar sus poblaciones. Hoy, buitres y ganaderos son víctimas, nunca enemigos, porque ni unos se han vuelto locos ni los otros malos de la noche a la mañana.
Tres años
Tres años para aumentar la cuantía de las indemnizaciones por ataques. Tres años en los que se da por hecho que el buitre ataca, por no aplicar suficientemente el marco legal nacional y europeo que autoriza la alimentación de estas aves. Tres años de debate sobre el comedero de Ordunte a expensas del sufrimiento de aves y el desamparo de ganaderos. Tres años en los que no se lleva a cabo una correcta y necesaria estrategia interprovincial coordinada. Mientras, poblaciones de aves vagan de una a otra autonomía en busca de comida. Los buitres pueden volar en un día más de 200 kms.
¿Hay muchos Buitres?
Las aves regulan sus poblaciones en función de la comida y la existencia de lugares tranquilos para nidificar. Si hay más buitres en una región, es porque uno y otro factor no han limitado las poblaciones. Los buitres habían aumentado en parte de España porque durante 15 años muchas autonomías los usaron para eliminar las bajas de la ganadería intensiva (industrial). Es revelador comparar cómo crecían las poblaciones de aves a la par que progresaban las granjas intensivas. Hace tres años se implantaron servicios-negocios de recogida de reses muertas. Anteponer la costosa recogida de los cadáveres animales a su eliminación natural y gratuita por los buitres, ha provocado un desfase entre sus poblaciones y la cantidad de alimento disponible. Ocurre sobre todo en la mitad Norte y Este de la Península.
¿Control de las poblaciones?
Hoy, el hambre no es una herramienta de gestión y los comederos no son la única solución. Es el momento de empezar a recuperar usos tradicionales del territorio y a devolver a la ganadería extensiva su vínculo ancestral y sostenible con las aves en espacios comunes para ambos.
Los buitres son los vertebrados ibéricos que se reproducen más despacio. La experiencia histórica muestra que sus poblaciones pueden hundirse en muy poco tiempo; y si esto sucede, resulta enormemente difícil y costosa su recuperación.
Buitres y Crisis
Resulta contradictorio que en tiempos de crisis una administración pública esté dispuesta a pagar más por unos episodios que no existirían si se permitiese a estas aves cumplir su misión. Se ahorraría dinero público si no se desestimara la opción saludable de emplear a las aves como lo que son: Perfectas Recicladoras. Un buitre elimina 180 kilos de carroña al año, ahorra 50 litros de gasóleo y una tonelada de gases de efecto invernadero. Hoy los buitres se mueren de hambre. Dinero público que les niega su derecho a vivir y salvaguarda los intereses de empresas de tratamiento y recogida de reses muertas. Una Administración no debe anteponer el bien privado al patrimonio común.
Conclusiones de expertos
En poco más de un año, varios de los máximos especialistas europeos en aves carroñeras se han reunido en el curso de la UNED en Plasencia (Cáceres) y en el congreso nacional organizado por Caralluma en Caravaca (Murcia); sin olvidar tampoco, el seminario del Museo de Ciencias Naturales de Madrid, ni la Jornada sobre Buitre y Ganadería en Morella (Castellón), y algunas más. Los dos primeros encuentros (los más prolongados) hicieron públicas unas importantes conclusiones, ampliamente consensuadas y difundidas dentro y fuera de España, que también deberían ser tenidas en cuenta.
IZATE Asociación Medioambiental (País Vasco)
SEAR ˆ Sociedad para el Estudio de las Aves Rapaces (País Vasco)
Equipo Triacanthos (Aragón)
Fondo Amigos del Buitre (Aragón)
Fondo para el Refugio de las Hoces del Riaza (Castilla y León)
SAIAK (Francia)